Estrategia y consejos II
PIENSA LO QUE PUEDE LLEVAR TU RIVAL.
No estés solo preocupado por tú jugada, intenta adivinar la jugada de tus oponente. Sería mucho más importante saber que llevan tus compañeros de mesa a que tú tengas una buena mano. A muchos jugadores noveles les ocurre que cuando ligan una jugada es como si se viesen ganadores y no piensan en otra cosa parece que les da igual lo que lleve su contrincante, pero a base de palos también se aprende. Debes observar cómo fue su juego desde el principio de la mano y así te harás una idea de lo que puede llevar, por ejemplo si subió en el preflop, y no es un jugador que por sistema lo haga, debemos pensar que lleva cartas altas o incluso una pareja. No te veas nunca como seguro ganador de la mano a no ser que tu jugada sea la máxima posible.
SI LOGRAS EL RESPETO DE LO DEMÁS PODRÁS FAROLEAR.
Al igual que tú observas y rápidamente te das cuenta de quién o quiénes son los jugadores a tener en cuenta, ellos harán lo mismo contigo, y en función de tú comportamiento te temerán o te catalogarán de primo. Esto se consigue jugando tranquilo, centrado y seguro. En cuanto des un par de palitos y digas aquí estoy yo podrás pegarte algún farolillo y robar algo. En el Texas Hold’em, se puede a veces farolear si el flop contiene un as. Tus oponentes a menudo se retirarán si no tienen ninguna pareja o una escalera abierta. No trates de derrotar a los otros jugadores, déjalos que traten de derrotarte a ti.
HAZ MOVIMIENTOS PREMEDITADOS QUE HAGAN CAER EN TRAMPAS A TUS RIVALES.
Varía tu estrategia de juego. El jugador cuyo juego es siempre el mismo se convierte en un jugador previsible y fácil de detectar por los demás jugadores.
Cuando las cartas que te han tocado sean bajas como por ejemplo (2 y 7 de diferente palo) que son las peores cartas que te pueden tocar en el Texas holdem, piensa que cualquier jugada ganadora está muy lejos por lo que tus posibilidades de ganar esa mano son escasas, ¡vamos! Sal corriendo y tírate rápido. Pero ocurre otra cosa, que cuando tienes cartas de ese tamaño o cartas flojas pero conectadas, es decir (5-6, 7-8, 4-5) y si tu posición con respecto a fichas y estatus es cómoda, no está mal ir e incluso subir algo, no mucho en la primera ronda de apuestas, osea antes del flop , de esta manera tus rivales pensarán que llevas cartas altas y si en el flop, turn y river, salen cartas pequeñas y ligas algo la vas a liar porque el que haya ido contigo antes del flop tiene cartas altas y el espera que tu también las tengas. Si en algún momento en el flop, turn o river salen cartas altas superiores a las tuyas con pasar o retirarte es suficiente, por lo menos lo has intentado y no has perdido mucho, ya sabes como regla general no hagas esto, lo normal es tirarse de cartas pequeñas pero de vez en cuando vé, busca el momento adecuado sin hacer locuras y sin meterte en un berenjenal del que puedas salir mal parado. Las cartas pequeñas también te pueden hacer ganar manos al igual que las de más alto valor te pueden hacer perder. Si tienes la mano ganadora y lo sabes, y tu rival te va subindo en cada ronda de apuestas, deberás sólo igualar hasta llegar al river donde tú le resubirás. Si tu rival no te sube tienes dos opciones, apostar en la última ronda esperando que consiga algun par o hacer subidas pequeñas suficientes para que tu rival te iguale, si subes demasiado se ira y no le habrás sacado mucho.
RETIRATE AÚNQUE TENGAS UNA BUENA MANO SI SABES QUE PIERDES.
Si estás convencido que vas a perder y tienes una buena mano, debes tirarte. Con dos ases hay veces que no conviene llegar hasta el final. Con un dos y un tres no se pierde dinero pero con dos ases se puede llegar a perder mucho. En el Texas Hold’em, puedes apostar con un as o dos cartas altas inferiores a un as en el flop, pero deberías retirarte si alguien sube tú apuesta. Si alguien apuesta antes en el flop, puedes igualar con dos cartas altas, pero retírate en el turn a menos que mejore tu mano. Tener una pareja media con una carta alta en el flop es una buena jugada, pero deberías retirarte en el turn si alguien apuesta y tu mano no ha mejorado.
SABER CUANDO LEVANTARSE DE LA MESA O APAGAR EL ORDENADOR.
Si no te va bien, no te empecines en recuperar, una retirada a tiempo es una victoria y mañana será otro día, seguramente tus contrincantes son mejores o la suerte no ha estado igual para todos.
